Una experiencia entre los restos romanos, patrimonio de la UNESCO, la Isola del Sole y la Isola della Cona. Aquileia te sorprenderá una y otra vez con los restos romanos y la impresionante basílica con mosaicos. Retroceda en el tiempo para admirar los restos de un pasado brillante, cuando Aquileia fue el segundo puerto más importante del Imperio Romano y más tarde la sede del Patriarcado durante más de 4 siglos. Y luego, a pocos kilómetros, la ciudad costera de Grado con sus playas doradas y el encantador casco antiguo de origen veneciano, rico en historia y anécdotas. Disfrute de la relajación de estos alrededores y pruebe los excelentes platos de pescado acompañados de un excelente vino friulano. También te llevaremos a la isla de la Cona, la reserva natural de la ría del Isonzo, que representa un contexto natural especial que se puede vivir y vivir de diversas formas.
ITINERARIO
Check in y cóctel de bienvenida donde se encontrará con el guía que le resumirá la experiencia que queremos que viva. Luego traslado a la antigua ciudad romana de Aquileia, uno de los principales sitios arqueológicos del norte de Italia e identificado en el siglo IV como la novena ciudad más grande del mundo. Aquileia fue una ciudad importante y el principal centro de difusión del cristianismo en el norte y este de Europa. Ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco por la inmensidad de sus sitios arqueológicos y por el valor artístico de sus mosaicos paleocristianos. Visitaremos los dos museos nacionales y la extraordinaria basílica patriarcal llena de mosaicos invaluables. La visita a la ciudad patriarcal durará toda la tarde. Regreso al hotel y después de una breve relajación, se recomendará una cena de pescado, degustando las diversas especialidades de la cocina Gradese (por ejemplo, el boretto).
Durante la noche
Desayuno
Temprano en la mañana, salida hacia la Isla de la Cona, un oasis natural a pocos kilómetros de Grado. Nace en la desembocadura del río sagrado para la patria Isonzo (famosa por las 12 sangrientas batallas de la Primera Guerra Mundial). Nace en la desembocadura del río sagrado para la patria Isonzo (famosa por las 12 sangrientas batallas de la Primera Guerra Mundial). La integridad de la zona está garantizada por constantes intervenciones ambientales y también se confía a los propios animales, como los caballos de Camargue que viven libres en la Reserva y ayudan a controlar el desarrollo de la vegetación. Es posible practicar actividades para acercarse a los caballos en su hábitat, o realizar verdaderas excursiones a caballo dentro de la Reserva. Dentro de la Reserva también es posible reservar un evocador paseo en canoa por los tramos de agua acompañado de un guía naturalista experto.
El almuerzo será en un restaurante cercano donde la amabilidad de los dueños irá de la mano de los platos que tendrás el gusto de pedir.
Por la tarde el guía lo llevará de regreso a Grado, donde podrá disfrutar de una tarde relajante, por ejemplo visitando la playa de arena muy fina y dorada. Pero también puedes optar por entrar en la estructura del spa y buscar el tratamiento que más te convenga.
Por la noche, serán invitados en otro excelente restaurante en la Isola del Sole. Una maravillosa oportunidad para degustar productos locales de alta calidad preparados según tradiciones centenarias, el plato local más famoso es el boreto a la graisàna, una sopa de pescado tradicional de la zona.
Absolutamente imperdible será el paseo después de cenar por los callejones del sugerente centro histórico de Grado amenizado por el guía que te contará historias y anécdotas particulares: prepárate para descubrir algunos de sus tesoros escondidos.
Desayuno
Después de la salida, el guía seguirá alojado para que pueda disfrutar de las bellezas de Grado durante el día. Tour de un par de horas para conocer la intrigante historia de este puerto marítimo. La ciudad se describe a menudo como un pariente cercano de Venecia; una vez fue la más importante de las dos ciudades. Al igual que Venecia, Grado fue poblada por los habitantes de los asentamientos romanos en el continente que huyeron a las lagunas para escapar de las invasiones posteriores. Después de la caída de la ciudad romana de Aquileia en el siglo VI, Grado se convirtió en la sede del Patriarca o Arzobispo responsable de las islas de la laguna del Adriático e Istria. A principios del siglo XIX, la aristocracia de los Habsburgo vino aquí para bañarse en las excelentes fuentes termales marinas y para cuidarse a sí mismos dado el clima particularmente bueno rico en yodo.
Al finalizar será nuestra responsabilidad el traslado al lugar de salida.
